¿Te imaginas ir en bus urbano a esquiar? ¡En Vancouver es posible! Desciende con tus esquís por las pistas de la Grouse Mountain mientras disfrutas del skyline de la ciudad. Porque Vancouver tiene rincones de todo tipo, desde el parque Stanley, el pulmón de la ciudad, hasta los tesoros hippies que te encuentras callejeando sin destino final son el reflejo de la vida al aire libre.. ¿Sabías que, después de Japón, Vancouver es el mejor lugar para comer sushi? Podrás saciar tus antojos de este manjar japonés en el barrio asiático de Richmond, uno de los lugares que hay que visitar en Vancouver.
“Con el invierno más suave del país, esta ciudad es el vivo retrato de la vida al aire libre”
Encuentra la mezcla perfecta entre naturaleza y modernidad en los jardines de Butchart, uno de los lugares que hay que ver en Vancouver y donde podrás tomarte el té entre millones de colores de flora salvaje. Subir al Vancouver Lookout y capturar con tu retina una imagen de 360 grados de la ciudad canadiense o pasear en el Sea Bus por la lengua de mar que separa Downtown y Noth Vancouver y conocer a vista panorámica su lado cosmopolita y su región más verde. Porque viajar a Vancouver es atravesar el Capilano Suspension Bridge Park por el puente colgante más largo del mundo y conocer el Vancouver más auténtico paseando por Gastown. ¿Preparado para descubrir todo lo que hay que ver en Vancouver sin bajar de los 0 grados?