Visitar el Palacio Golestán es sentirse como un rey al pasear por los jardines y salones de la residencia de los últimos sahs de Persia... ¡uno de los mejores ejemplos de arquitectura persa del mundo! El Trono de Mármol, donde los reyes fueron coronados y con estancias como el Rincón de Karim Jan, de los salones con más encanto del palacio es como adentrarse en una época pasada. Todos los rincones cuentan con detalles que los hacen diferentes al resto. ¿Estás listo para descubrir por qué este lugar se conoce como el Palacio de las Flores?
"Y sentirse como un auténtico kayar de la dinastía persa..."
Al visitar al Palacio Golestán podrás descubrir el curioso sistema de aire acondicionado que se empleaba en la antigüedad, y es que en una zona tan desértica como esta, ¡era esencial el uso del ingenio para resistir las altas temperaturas! Piérdete por el Palacio de Golestán y por las filigranas doradas que adornan sus paredes, déjate llevar por el encanto enigmático y mágico de Oriente y explora la Ruta de la Seda... ¡como un verdadero aventurero!