Cuando uno se pregunta que ver en Pekín lo primero que se le viene a la cabeza es la Gran Muralla. Desde la frontera de Corea hasta las arenas del desierto de Gobi, atravesando montañas gigantes y ciudades imperiales y con una longitud de más de 7.000 km, la muralla china es uno de los espectáculos visuales más increíbles que la mano humana nos ha podido obsequiar. ¿Te apuntas a descubrir una de las siete maravillas del mundo moderno?
“Más de 2.000 años y 800.000 trabajadores fueron necesarios para construir una de las mayores obras de ingeniería del mundo”
El paso del tiempo y la erosión han jugado una mala pasada en algunas partes de la muralla china, pero los mejores tramos son Badaling y Mutianyu, ya que han sido las afortunadas de permanecer exactamente como el primer día de su construcción hace, ni más ni menos, ¡2000 años! Recorre la muralla con calma, disfruta de sus vistas y deja que tu imaginación viaje a tiempos de la dinastía Qing mientras que el sol cae sobre las verdes montañas Yan. Y para terminar tu viaje a China ¿qué tal despedirte de la Gran Muralla bajando por un tobogán?