Porque Sicilia es la isla de la historia, de los griegos, de los fenicios y, por supuesto, de los romanos. El la isla del mar mediterráneo, del auténtico sabor italiano y de los paisajes más variopintos. Hay tantos lugares imprescindibles en la isla que no perderse en Sicilia sería casi un delito. Piazzas barrocas, callejuelas medievales, ruinas griegas, castillos normandos e incluso molinos de viento se esconden en los destinos más increíbles de la isla siciliana.
“Dos volcanes activos, el patrimonio artístico y cultural más rico de Italia y 1.500 kilómetros de costa hacen de Sicilia el destino perfecto”
Lugares de interés como Palermo y su capilla palatina, como el parque natural del Etna y su activo volcán, como Erice y sus callejones y patios secretos o como las odiseicas islas Eolias son solo algunos de los sorprendentes parajes que hay que ver en Sicilia. Pero como buena isla, Sicilia también puede presumir de playas largas como la de Cefalú, en pleno mar Tirreno, o de calas tan recónditas como la de Capreria, en el corazón de la reserva natural de Zingaro. Porque sí, hacer turismo en esta isla infinita te mostrará la otra cara de Italia.