¿Te imaginas poder pasar de un continente a otro con solo cruzar un puente y sin salir de la misma ciudad? Eso es algo que solo podrás hacer en un viaje a Estambul, dividida por el Estrecho del Bósforo. Recorre las 64 calles del Gran Bazar y sumérgete en su cultura al regatear con los comerciantes de sus 10000 tiendas, una de las cosas más auténticas y divertidas de la ciudad más importante de Turquía. Plántate entre la Mezquita Azul y la Basílica de Santa Sofía y siente cómo la multiculturalidad inunda cada rincón de la ciudad.
"Una ciudad que pertenece a dos continentes: mitad europea, mitad asiática..."
Desde la Torre Gálata tendrás las mejores vistas de la ciudad y del puente del mismo nombre. Contempla una de las obras más representativas del arte islámico en la Mezquita de Solimán el Magnífico, donde descansan los restos del sultán y su esposa y descubre “el Tesoro” que alberga el Palacio Topkapi, donde se guardan un diamante de 88 quilates y una daga enterita de oro y esmeraldas. Porque sí, un viaje a Estambul está repleto de secretos, como la razón por la cual hay dos cabezas de medusas del revés en la Cisterna Basílica. ¡Atrévete a descubrirlo!