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Un viaje se mide mejor en amigos que en millas.
Siempre desde muy joven me encantaba viajar, descubrir nuevos lugares y personas. He nacido en un país tropical, grande, fascinante, con una naturaleza exuberante y personas de muchas mezclas y de muchos orígenes. Así que tenía mucho por descubrir: la costa de Brasil con todas sus magnificas playas, su interior con distintas culturas y paisajes. Después me fui a estudiar en Estados Unidos y descubrí nuevas experiencias y personas y, con esas personas, nuevos lugares por explorar... Y no he parado más: viajes místicos en Perú, culturales por Europa o buceo y trekking en Brasil son experiencias que llevo dentro de mi corazón. Y lo mejor: los amigos que he hecho en el camino... Me siento muy afortunada por tener la oportunidad de viajar. El arte de viajar nos exige mucho; es salir del lugar común, ponernos en lugar del otro y comprender y respetar todos los demás. Estar en otro país es abrazar al desconocido y dejarse llevar, aprender con humildad y descubrir nuestra esencia.